Este es el efecto que pocos conocen del sol y que es más frecuente de lo que pensamos
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El sol tiene muchos beneficios para la salud pero hay veces en los que puede jugarnos malas pasadas, sobre todo si tenemos fotosensiblidad o si utilizamos productos que favorecen este proceso. Te contamos qué es y cómo identificarlo.
Actualizado a: Viernes, 18 Julio, 2025 09:36:55 CEST
Cuando llega el verano es habitual tomar el sol en los destinos a los que vamos de vacaciones o pasar los días libres. Esto, sin la adecuada protección puede pasarnos factura en modo de quemaduras solares y daño cutáneo pero hay otro efecto del sol que pocos conocen y que es más habitual de lo que pensamos. Es la fotosensibilidad.
Como explica a CuídatePlus Jerónimo Ors, farmacéutico, “esto es una reacción anómala y excesiva a la radiación solar o a la radiación ultravioleta. Unas veces es provocada de forma espontánea por nuestro cuerpo y otras por la ingestión de medicamentos, llegando a provocar fototoxicidad”. Cuanto sufrimos fotosensibilidad “lo que ocurre es que una serie de sustancias que hay en nuestra piel reaccionan de forma intensísima con la energía de la radiación ultravioleta, originando una reacción que inflama la piel y que puede llegar a destruirla”.
Desgraciadamente, señala el farmacéutico, es una reacción que se da con cierta frecuencia. “Aunque es difícil cuantificarlo, porque solo los casos más graves llegan al médico”, apunta. Los demás casos “se perciben como una quemadura solar de mayor o menor intensidad”.
Hay que señalar que su incremento se debe, en parte, “al contacto con sustancias químicas, la alimentación con muchos aditivos, el consumo cada vez más extendido de medicamentos y la contaminación ambiental que producen un aumento de la sensibilidad de la piel”. Además, es un problema que puede ocurrir a cualquier edad pero las personas con más riesgo son “aquellas sometidas a un fuerte estrés, las que toman medicamentos fotosensibilizantes como algunos antibióticos o quimioterapia”, informa el también director de Cosméticos Paquita Ors.
“Las jóvenes embarazadas, las que tienen tendencia al estreñimiento, las que manejan sustancias químicas habitualmente y las que pasan mucho tiempo al aire libre”, también “son más susceptibles de sufrir esta agresión en su piel”.
¿Cómo lo identificamos? “El ejemplo más clásico es que nos quemamos con extraordinaria facilidad”, indica el farmacéutico. La piel aparece “roja, hinchada, tenemos sensación de incomodidad y tirantez”. Si el fenómeno es muy intenso, “podemos tener fiebre”. En estos casos, “conviene ir a urgencias”.
Los cosméticos más fotosensibilizantes
Pero no sólo situaciones determinadas pueden producir fotosensibilidad sino que también hay cosméticos que usamos a diario y que pueden producir o aumentar la sensibilidad solar. “En unos casos porque descaman la piel, disminuyendo la barrera protectora, como pueden ser los ácidos frutales o el ácido azelaico”, señala el farmacéutico. Estas sustancias “tienden a pelar la epidermis. La piel está algo más débil y, por tanto, es más sensible a la agresión solar”.
Las sustancias que más habitualmente producen sensibilidad en la piel son los retinoles. “Esto se debe a su capacidad de acelerar el ritmo de renovación de la piel, y muchas veces cuando se aplican en pieles sensibles, descaman la epidermis de forma más o menos suave”, informa. Por eso “es muy importante utilizarlos durante las horas nocturnas”. Y es que, a esas horas, “particularmente entre dos y tres de la madrugada, nuestra piel respira más profundamente, se regenera y absorbe mejor los activos, con lo que estos productos serán más efectivos”. Además, así “minimizamos los efectos sensibilizantes que pueden tener. Aunque siempre es conveniente utilizar fotoprotector durante el día”, concluye.